Un conjunto de instituciones de la sociedad civil de México, Centroamérica y Norteamérica2 que trabajan en la temática de la niñez y adolescencia en el contexto de la migración, manifiestan su preocupación por las estrategias coyunturales que plantean los gobiernos de Estados Unidos, México y Centroamérica. Las medidas que han sido anunciadas o están en discusión no sólo van en contra de los derechos humanos y protección de los niños, niñas y adolescentes (NNA), sino que, por un lado, no reducirán en modo alguno la migración, y por el otro, podrá incrementar los niveles de violencia y de riesgos para la vida e integridad física de esos niños en los países de origen y en el tránsito hacia Estados Unidos.
Ante la reciente atención masiva del fenómeno de la migración de niños, niñas y adolescentes, que la sociedad civil desde hace tiempo viene llamando la atención y demandando políticas públicas adecuadas e integrales, la postura de los gobiernos de la región está focalizada en respuestas de corto plazo y desde una perspectiva de seguridad, que no tiene en cuenta las causas estructurales que lo origina. Existe una enorme preocupación que el discurso (debate) sobre los fondos que planea asignar Estados Unidos a los países de la región se enfocan en su mayoría para acciones de control y militarización fronteriza, lo cual sólo incrementará la vulnerabilidad de los niños y, entre otras cosas, su necesidad de migrar.
1 Este Encuentro fue apoyado por Alianza para las Migraciones en Centroamérica y México / Central America and Mexico Migration Alliance - CAMMINA, en el marco del proyecto "Fortalecimiento del Abordaje Institucional Regional en Materia de Niñez Migrante" liderado por la Asociación Misioneros de San Carlos Scalabrinianos. CAMMINA es una alianza creada por tres organizaciones filantrópicas internacionales (Fundación Avina, Fundación Ford, y las Fundaciones para una Sociedad Abierta), cuya misión consiste en lograr cambios sostenibles en políticas públicas que promuevan los derechos de las personas migrantes y contribuyan a la sostenibilidad económica de las comunidades de origen en México y Centroamérica para que la migración pueda ser considerada una opción y no una necesidad. 2 Desde hace meses se ha constituido el Grupo de Trabajo Regional sobre Niñez Migrante conformado por varias organizaciones de sociedad civil de países de Honduras, El Salvador, Guatemala, México (frontera Sur, Centro y Frontera Norte) y Estados Unidos. El propósito fundamental de este Grupo de Trabajo ha consistido en generar espacios y momentos para el encuentro, discusión y construcción de propuestas conjuntas con una perspectiva regional en el tema de niñez migrante no acompañada. Un elemento novedoso en esta articulación es que convoca a los países de origen, tránsito y destino lo que permite tener una lectura más completa de las distintas dinámicas, así como, complementar y nutrir ejercicios propios y/o compartidos.
Los países en la región todavía no ofrecen soluciones concretas ante las distintas formas de violencia (social, institucional, de género, doméstica), persecución, discriminación y exclusión social que están expuestos los NNA y los presiona a abandonar sus comunidades. El enfoque de seguridad que priva en la agenda migratoria de los países se aleja de la impostergable necesidad de presentar programas de desarrollo humano de corto y largo plazo, a fin de generar condiciones y oportunidades para una vida digna y exenta de toda forma de violencia. Las soluciones no se pueden centrar únicamente en la necesidad de desestimular la migración, ya que estas medidas no tienen ningún efecto si precisamente no se atienden sus causas.
Los Estados han expresado públicamente que se trata de una crisis humanitaria. Por lo tanto, la respuesta debe estar basada en criterios humanitarios, lo cual incluye medidas de protección inmediata, pero también de largo plazo, para todos estos niños y niñas. Ello necesariamente incluye una perspectiva de derechos humanos y desarrollo, que atienda la multiplicidad de factores que conducen a esta situación. Estos factores están estructuralmente entrelazados, y por eso precisan ser abordados conjuntamente.
Es urgente que los gobiernos de Estados Unidos y México revisen sus políticas migratorias pues su práctica y política migratoria están encaminadas al endurecimiento de la seguridad de sus fronteras, lo que genera mayor control y persecución de las personas migrantes y que pone en riesgo especialmente a NNA, quienes a pesar de ser deportados, en muchos casos vuelven a intentar la ruta migratoria, exponiéndose una y otra vez a los riesgos del camino, y a sufrir violaciones de derechos humanos. Es preciso que den a este fenómeno estructural y multidimensional, otras respuestas como:
- Los países de origen, tránsito y destino deben privilegiar la protección de los NNA y la garantía de sus derechos en los diferentes momentos de la migración.
- En lo inmediato, es imprescindible que los niños y niñas no sean retornados ni deportados automáticamente, ni colocados en centros de detención migratorios. Al contrario, se les debe alojar en albergues que los protejan integralmente y que cuenten con las condiciones apropiadas a sus derechos, y especialmente que posibiliten el derecho a la unidad familiar.
- Debe asegurarse la implementación de medidas de protección integrales adecuadas en cada caso, sobre la base del interés superior del niño o la niña. Estas medidas deben ser el resultado de un procedimiento que de manera individualizada asegure las debidas garantías procesales, incluyendo el derecho a la defensa legal, a un tutor, derecho a la información adecuada en su idioma, a ser escuchado/a y el acceso a la asistencia consular, entre otros de acuerdo a la Convención de los Derechos del Niño/a de Naciones Unidas.
La actual situación representa una importante oportunidad para que los Estados involucrados, bajo el principio de responsabilidad compartida, aborden de manera integral y con medidas a corto, mediano y largo plazo este fenómeno, para que mejore el presente y futuro de miles de de niños, niñas y adolescentes en los países de origen, tránsito, destino y retorno.
En este sentido, convocamos a los gobiernos a adoptar, nacional y regionalmente, políticas de desarrollo humano que respeten el derecho a no migrar, asegurando condiciones de vida digna, adecuada y libre de todas formas de violencia y discriminación para todas y cada una de las personas, y que en caso de que migren reciban a estos niños y niñas migrantes ya sea de una forma permanente o transitoria, brindándoles la protección humanitaria y el debido proceso requerido bajo las leyes nacionales e internacionales.
FIRMANTES:
Observatorio de Legislación y Política Migratoria, El Colegio de la Frontera Norte - Casa YMCA de Menores Migrantes - Iniciativa Frontera Norte de México - Centro de Derechos Humanos Fray Matías de Córdova A.C. /México - Asociación Misioneros de San Carlos Scalabrinianos /El Salvador - Pastoral de Movilidad Humana /Guatemala - Asociación Pop No´j /Guatemala - Casa Alianza/ Honduras - El Centro de Estudios de Género y Refugiados - National Immigrant Justice Center - Trans-Border Institute - Kroc School of Peace Studies, University of San Diego- Latin America Working Group – Washington Office on Latin American (WOLA) – Kids in Need of Defense (KIND) /Estados Unidos - Centro de Derechos Humanos de la Universidad Nacional de Lanús/ Argentina.
CONTACTOS:
Carol Girón Solórzano
Pastoral de Movilidad Humana
Guatemala (502) 2432 5654
Jennifer Johnson
Latin America Working Group
Washington, DC (202) 546-7010
Lourdes Rosas
Centro de Derechos Humanos Fray Matías de Córdova A.C.
Tapachula, Chiapas (52) 96264 250 98